lunes, 16 de enero de 2017

PATANJALI YOGA por Sri Swami Sivananda

Patanjali Maharishi es el exponente de la filosofía del Yoga (...) Descubrirás en el Yanavalkia Smriti que fue Hiranyagarbha el maestro original del Yoga. Patanjali Maharishi fue sólo quien compiló o explicó los preceptos, las doctrinas y las enseñanzas yóguicas enseñados por Hiranyagarbha. 

 Maharishi Patanjali - arte: Manivelu

Los Yoga Sutras:
La filosofía del Yoga de Patanjali se describe en las Sutras. Una “Sutra” es una afirmación breve. Es un dicho aforístico, rebosante de un significado profundo y oculto. Los Rishis de antaño expresaron las ideas filosóficas y su realización únicamente en forma de Sutras. Es muy difícil comprender el significado de las Sutras sin la ayuda de un comentario, una glosa o un maestro que esté versado en el Yoga. Un Yogui plenamente realizado puede explicar bellamente las sutras. Literalmente, Sutra significa hilo. Igual que se disponen de forma agradable diversos tipos de flores de distintos colores, atándolas con una cuerda para formar una guirnalda, e igual que las ristras de perlas se ordenan bellamente con un hilo para formar un collar, así también las ideas yóguicas se ordenan en forma de Sutras, las cuales se reagruparon, a su vez, en capítulos. 

El primer capítulo: 
El primer capítulo se llama Samadhipada y trata acerca de los distintos tipos de Samadhi. Contiene 51 Sutras. En él se describen los obstáculos en la meditación, los cinco tipos de Vrittis y su control, los tres tipos de Vairagya, la naturaleza de Ishvara, los diversos métodos para entrar en Samadhi y la forma de adquirir paz de mente desarrollando las virtudes. 

El segundo capítulo:
Este capítulo se llama Sadhanapada y constituye 55 Sutras. Tratan acerca de Kriya Yoga, es decir: sobre Tapas; el estudio y la entrega a Dios; las cinco Kleshas o aflicciones; los métodos para destruir éstas, que se alzan en el camino hacia el logro del Samadhi; Yama y Niyama y sus frutos; la práctica de Asana y de Pranayama y sus beneficios; Pratyahara y sus ventajas, etcétera. 

El tercer capítulo: 
El tercer capítulo es el Vibhutipada y contiene 56 Sutras. Trata sobre Dharana, Dhyana y los distintos tipos de Samyama en los objetos externos, en la mente, en los Chakras internos y en diversos objetos, así como para adquirir diversos Siddhis. 

El cuarto capítulo:
El capítulo cuarto se llama Kaivalyapada y trata sobre Kaivalya, o la Independencia. Contiene 34 Sutras y trata acerca de la independencia de un Yogui plenamente evolucionado, que tiene una discriminación perfecta entre Prakriti y Purusha, y que ha trascendido las tres Gunas. También trata acerca de la mente y su naturaleza, y en él se describe el Dharmamegha Samadhi. 

¿Qué es el Raja Yoga? 
El Raya Yoga es el rey de todos los Yogas. Trata en particular acerca de la mente. En este Yoga no se produce ninguna lucha ni con la fuerza vital ni con el cuerpo físico. No hay en él Kriyas de Hatha Yoga. El Yogui se sienta cómodamente, observa la mente y silencia sus pensamientos en ebullición. Aquieta la mente y apacigua las olas del pensamiento, entrando así en el estado de no pensamiento, o Asamprajnata Samadhi. De ahí el nombre de Raja Yoga. Aunque este Raya Yoga es una filosofía dualista y trata acerca de Prakriti y Purusha, ayuda al aspirante en la Realización Advaita, o de la unión final. Aunque se menciona el Purusha, éste se hace idéntico al final con el Ser Superior, o el Brahman de los Upanishads. 

El Raja Yoga es el camino real para la liberación de la aflicción. Trata acerca de los cuatro grandes principios, que son la aflicción, su causa, la liberación de ella y los medios hacia ésta. La práctica de los métodos prescritos en el Raja Yoga conduce al cese de todas las aflicciones y al logro de la dicha eterna. 

El Raja Yoga se llama también Ashtanga Yoga, o el Yoga de las ocho etapas. Estas ocho etapas son: Yama, Niyama, Asana, Pranayama, Pratyahara, Dharana, Dhyana y Samadhi. 

Yama y Niyama: 
Yama y Niyama son los pasos más importantes preliminares en la práctica de la meditación. Si no te has establecido en ellos, simplemente te romperás las piernas si tratas de correr hacia la meditación y el Samadhi. Pero no puedes esperar a perfeccionarte en todos los Yamas y Niyamas, pues tomaría toda una vida practicar incluso una sola de las Yamas. Por tanto, tendrás que ir practicando Yama y Niyama y, al mismo tiempo, seguir con la concentración y la meditación, aunque no estés plenamente establecido en aquéllas. 

Yama consiste en Satya, Ahimsa, Brahmacharya, Aparigraha y Asteya. Satya significa veracidad en todo sentido en la vida diaria. Sólo sabemos de una persona, Harischandra, que se estableció perfectamente en la verdad, tan difícil es establecerse en esta virtud, aunque hay muchas personas que tratan de practicarla en la vida diaria. Ama a todos; ésta es la práctica de Ahimsa. Aunque no puedas observar un autocontrol o Brahmacharya perfecto, lleva una vida ordenada. No lleves una vida de lujos. Reduce tus necesidades: ésta es la esencia de Aparigraha. Asteya consiste en no codiciar la riqueza de los demás. Quienes desean alcanzar lo Absoluto Imperecedero deben observar estos cánones inflexiblemente. 

Niyama consiste en Saucha, Santosha, Tapas, Svadhyaya e Ishvara-Pranidhana. Saucha significa pureza interna y externa. La pureza interna, de la mente y del corazón, es la más importante. Libérate de los malos Vrittis. Santosha, o el contento, es la riqueza más grande y el mayor tesoro. Tapas es austeridad. La falta de ego y el servicio desinteresado constituyen la mayor forma de Tapas. La humildad y la carencia de deseos constituyen la mayor forma de austeridad. Practícalas a través de un servicio desinteresado incesante e incansable. Practica los tres tipos de Tapas mencionados en el Guita. Las prácticas disciplinarias, como el ayuno y otras, forman parte del estudio de los libros religiosos. La recitación de Mantras se considera también como Svadhyaya. Finalmente, tenemos Ishvara Pranidhana o la entrega al Señor. “Yo soy Tuyo y todo es Tuyo, mi Señor; hágase tu voluntad”. Éste es el Mantra de la entrega propia.   

Asana y Pranayama: 
Después de Yama y Niyama viene Asana. Patanjali no concede mucha atención a las Asanas. Prescribe simplemente una postura para sentarse firme y confortable. Sólo pretende que consigas una postura cómoda, en la que puedas sentarte durante mucho tiempo sin dejar que el sueño te venza. En el Hatha Yoga existen muchas asanas y ejercicios de Pranayama, los cuales se desarrollaron posteriormente. Al igual que las asanas, se desarrollaron en el Pranayama las Ashta-Kumbhakas. Te enseñaré los cuatro ejercicios más fáciles e importantes de Pranayama. El primero es un Pranayama muy fácil, llamado Shuka Purvaka. Puedes practicarlo incluso echado sobre la cama. Inspira cuanto aire puedas con comodidad a través de ambas fosas nasales, retenlo cómodamente y luego espira. El siguiente Pranayama es Sandhya Pranayama o Anuloma Viloma Pranayama. 

Inspira a través de la fosa nasal izquierda, retén la respiración y luego espira a través de la fosa nasal derecha; inspira entonces a través de la fosa derecha, retén y espira a través de la izquierda. Eso constituye una vuelta de Pranayama. La proporción entre Puraka, o la inspiración, Kumbhaka, o la retención, y Rechaka, o la espiración, debe ser de 1:4:2. Pero al principio no debes preocuparte de ello. Cuando seas un experto, la proporción se mantendrá por sí sola. Particularmente durante la retención, repite tu Ishta Mantra. Esto es más efecto. Te llenará de energía divina. El tercer tipo es Bhastrika, que consiste en una espiración e inspiración rápidas, como el movimiento de un fuelle. Incluso una sola vuelta de Bhastrika te revigorizará en pocos segundos. Hazlo en invierno. En verano puedes hacer una vuelta en las primeras horas de la mañana. El cuarto tipo es Sitali. Forma un tubo con tu lengua e inspira a través de ella, retén y luego espira. Sitali es muy bueno en verano. Refresca instantáneamente tu organismo y purifica tu sangre. Es como beber un vaso de agua helada. Si practicas todos estos Pranayamas durante un tiempo considerable, Kevala Kumbhaka sobrevendrá por sí sola. Kevala Kumbhaka es Kumbhaka sin Puraka ni Rechaka; es decir, la retención de la respiración sin inspiración ni espiración. La mente se vuelve muy firme después de este Pranayama. 

Pratyahara: 
Pratyahara significa abstracción. Consiste en abstraer los Indriyas de los objetos externos. Los sentidos se absorben en la mente, que se ha vuelto pura por medio de la práctica de Yama, Niyama y Pranayama. La mente se vuelve entonces más calmada. Quien tiene poder sobre Pratyahara nunca se quejará de Vikshepa o distracción de la mente. Pratyahara proporciona poder al practicante. Cuando los Indriyas se abstraen de los objetos, puedes entonces fijar la mente en un punto. Pratyahara y Dharana son interdependientes.   

Dharana, Dhyana y Samadhi: 
Dharana es fijar la mente en algo externo o interno. La mente puede fijarse externamente en la imagen del Señor Hari, del Señor Krishna, del Señor Rama o de cualquier otro objeto o punto. Internamente se puede fijar en un Chakra cualquiera, en cualquier parte del cuerpo o en cualquier idea abstracta. Habiendo controlado el Prana por medio del Pranayama y los Indriyas por medio de Pratyahara debes tratar de fijar la mente en algo. Dharana solamente puede realizarse si estás libre de distracciones mentales. Tras Dharana viene Dhyana. En Dhyana dejas que la mente permanezca en el mismo pensamiento. El Bhagavad Gita hace una descripción muy bonita del proceso de Dhyana. Estudia su capítulo sexto. Acude a un lugar de reclusión secreto. Fabrícate en él un asiento ni muy alto ni muy bajo. Una tela, una piel de ciervo y hierba, dispuestas una sobre otra, constituyen la combinación ideal. Refrena los sentidos. Aquieta la mente. Mantén el cuerpo erguido, con la cabeza, el cuello y el tronco formando una línea recta. Mira hacia el Trikuti, o entrecejo. Cierra las avenidas por las que fluyen los sentidos hacia el exterior. Fija la mente en el Señor o el Ser, que se halla sentado en tu corazón. Retén la respiración en la coronilla por medio de la práctica de Kevala Kumbhaka. Entonces conseguirás una concentración de mente perfecta. Entrarás rápidamente en Dhyana y Samadhi. Esos tres pasos Dharana, Dhyana y Samadhi son más internos que los precedentes: Yama, Niyama, Asana, Pranayama y Pratyahara. Estos tres juntos (Dharana, Dhyana y Samadhi) constituyen Samyama. Los tres constituyen el Antaranga Sádhana del Raya Yoga. El verdadero comienza en Pratyahara y Samyama constituye la verdadera práctica del Raja Yoga. 

A través de la práctica de Samyama puedes penetrar en la verdad de aquello en lo que meditas. El Nirbija Samadhi (sin semilla) o Asamprajnata Samadhi es la meta final del Raya Yoga. Comparado con él, Samyama es también externo o indirecto. Es también una preparación, pues hay en ella Alambana, o algo de lo que la mente depende, mientras que en el Nirbija Samadhi la mente no depende de nada, es Niralambara. El practicante asciende así a lo largo de la escalera yóguica, peldaño a peldaño y adquiere distintas experiencias, conocimientos y poderes. Siente su libertad absoluta y alcanza la independencia o Kaivalya, que es la meta más elevada del Raja Yoga. La suma total del conocimiento de los tres mundos y de toda la ciencia secular no es más que una simple cáscara comparado con el Conocimiento Infinito de un verdadero Yogui que haya alcanzado Kaivalya. Gloria a tales Yoguis exaltados. ¡Que sus bendiciones desciendan sobre todos nosotros!


Fuente: "La Senda Divina" de Sri Swami Sivananda

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.